Post by Arrowni on Jun 24, 2018 13:37:20 GMT -5
La idea de tener un hilo sobre religión en el foro ni me había cruzado por la mente hasta como hace unas tres semanas. En efecto, casi nunca pienso en el foro durante mis horarios de vida normal y solo mientras trabajo o que me obligo a sentarme a redactar cosas el fin de semana (¡como hoy!) siquiera noto su existencia. Así que en cierta medida cuando me dije por primera vez "hey, podría poner un hilo sobre religión en el foro" fue un poco más una meditación del género "wow, pensé en el foro" y no reflexioné mucho más allá de esta primera impresión.
No es un secreto para nadie de los presentes que mi familia es bien religiosa. Tal vez he puesto menos énfasis en que a todas partes a donde me he movido en Francia siempre he tratado de integrarme en las parroquias locales y se ha vuelto más o menos una tradición. Cécile no es creyente pero como nos conocimos en un grupo de la Iglesia es un aspecto de mi vida que siempre ha conocido. Mi práctica de la religión, mi tolerancia y otros valores acaso más fantasmagóricos le hacen pensar que cayó con un católico no demasiado hardcore. Si a ella le conviene y yo no tengo que cambiar nada, entonces me doy por bien servido.
Si hay una razón legítima para que me meta a discutir de fe hoy día en vez de hace cinco años es principalmente por Dorian y Alexandre. Obviamente yo soy el encargado único y fidedigno de la educación religiosa que ellos reciben, que incluye pero no se limita a meterlos temprano a una comunidad para que vean a los católicos desde dentro y no como un animal en su jaula de zoológico. En Francia los cristianos practicantes no son precisamente abundantes, de algún modo muchas personas se las arreglan para ir solos a misa, volver a sus casas y no volver a hablar al respecto. Bueno, yo he tenido fases así, pero normalmente suceden en Iglesias donde no me siento muy cómodo o en momentos de transición donde estamos esperando mudarnos de barrio y cosas así. Aunque bueno, creo que meter a Dorian y Alexandre a esto me resulta relativamente fácil porque crecí con mis jefes que me obligaron a hacer el coro y a pasar un montón de tiempo en la Iglesia, incluso acá en Francia he vivido en un albergue de jóvenes cristianos, ido a lecturas de la Biblia y otras cosas del género. Tengo credenciales de mi propia infancia y conozco a los católicos franceses porque llevo años frecuentándolos. Con los niños es el aspecto más metafísico y ético de la cuestión de la fe que me interroga. Es medio freakeante tener que enseñarles ética a los niños sin aún meterte en la espiritualidad y otras cosmogonías más mafufas.
El segundo elemento que acaso amerita un poco de discusión es que mi integración en la parroquia actual va bien. De hecho estoy en un grupo de lecturas bíblicas que me llevan ocasionalmente a reflexiones un poco interesantes que me gustaría poder compartir. Una de las cosas que me encanta de la cultura teológica que terminé por aprender es que con lecturas atentas y sutiles puedes darte cuenta de que muchas nociones de religión dominguera que me impartieron de niño eran bastante aproximativas. Fundamentalmente las posiciones de la Iglesia son menos restrictivas de lo que suenan. Además tengo algunas viejas excusas sobre otras discusiones de religión que he tenido en línea o en otras parroquias que de ser funkys a lo mejor me animo un día a comentar.
No es un secreto para nadie de los presentes que mi familia es bien religiosa. Tal vez he puesto menos énfasis en que a todas partes a donde me he movido en Francia siempre he tratado de integrarme en las parroquias locales y se ha vuelto más o menos una tradición. Cécile no es creyente pero como nos conocimos en un grupo de la Iglesia es un aspecto de mi vida que siempre ha conocido. Mi práctica de la religión, mi tolerancia y otros valores acaso más fantasmagóricos le hacen pensar que cayó con un católico no demasiado hardcore. Si a ella le conviene y yo no tengo que cambiar nada, entonces me doy por bien servido.
Si hay una razón legítima para que me meta a discutir de fe hoy día en vez de hace cinco años es principalmente por Dorian y Alexandre. Obviamente yo soy el encargado único y fidedigno de la educación religiosa que ellos reciben, que incluye pero no se limita a meterlos temprano a una comunidad para que vean a los católicos desde dentro y no como un animal en su jaula de zoológico. En Francia los cristianos practicantes no son precisamente abundantes, de algún modo muchas personas se las arreglan para ir solos a misa, volver a sus casas y no volver a hablar al respecto. Bueno, yo he tenido fases así, pero normalmente suceden en Iglesias donde no me siento muy cómodo o en momentos de transición donde estamos esperando mudarnos de barrio y cosas así. Aunque bueno, creo que meter a Dorian y Alexandre a esto me resulta relativamente fácil porque crecí con mis jefes que me obligaron a hacer el coro y a pasar un montón de tiempo en la Iglesia, incluso acá en Francia he vivido en un albergue de jóvenes cristianos, ido a lecturas de la Biblia y otras cosas del género. Tengo credenciales de mi propia infancia y conozco a los católicos franceses porque llevo años frecuentándolos. Con los niños es el aspecto más metafísico y ético de la cuestión de la fe que me interroga. Es medio freakeante tener que enseñarles ética a los niños sin aún meterte en la espiritualidad y otras cosmogonías más mafufas.
El segundo elemento que acaso amerita un poco de discusión es que mi integración en la parroquia actual va bien. De hecho estoy en un grupo de lecturas bíblicas que me llevan ocasionalmente a reflexiones un poco interesantes que me gustaría poder compartir. Una de las cosas que me encanta de la cultura teológica que terminé por aprender es que con lecturas atentas y sutiles puedes darte cuenta de que muchas nociones de religión dominguera que me impartieron de niño eran bastante aproximativas. Fundamentalmente las posiciones de la Iglesia son menos restrictivas de lo que suenan. Además tengo algunas viejas excusas sobre otras discusiones de religión que he tenido en línea o en otras parroquias que de ser funkys a lo mejor me animo un día a comentar.